El ritual del champú es un paso esencial en nuestra rutina capilar, ¿pero sabías que a menudo cometemos errores que pueden afectar la salud y apariencia de nuestro cabello? En este artículo, abordaremos los errores comunes que todas hemos cometido al lavarnos el cabello. Descubre estos errores frecuentes y las buenas prácticas a adoptar para obtener un cabello sano y radiante.
1. Lavar el cabello con demasiada frecuencia:
La tentación de lavarnos el cabello a diario puede parecer irresistible, pero en realidad puede desequilibrar el sebo natural y secar nuestro cabello. Se recomienda espaciar los champús y encontrar una frecuencia adecuada para tu tipo de cabello. De dos a tres veces por semana suele ser suficiente para la mayoría de las personas.
2. Frotar fuerte el cuero cabelludo:
Cuando lavamos nuestro cabello, es importante evitar frotar agresivamente el cuero cabelludo. Esto no solo puede irritar la piel, sino también estimular una producción excesiva de sebo. En su lugar, utiliza movimientos suaves y circulares para masajear delicadamente el cuero cabelludo y estimular la circulación sanguínea. Si tienes el cuero cabelludo sensible, usa la yema de los dedos.
3. Comenzar lavando las longitudes:
Muchas de nosotras comenzamos aplicando el champú directamente en las longitudes y las puntas, descuidando así el cuero cabelludo. Para una limpieza profunda, es mejor comenzar masajeando suavemente el cuero cabelludo con el champú y luego hacer espuma con el producto distribuyéndolo en las longitudes.
4. Aplastar y engrasar las raíces con el acondicionador:
El acondicionador es un excelente producto para nutrir y desenredar el cabello, pero es importante aplicarlo de manera específica. Evita colocarlo en las raíces, ya que puede pesarlas y hacer que se engrasen más rápido. En cambio, concéntrate en las longitudes y las puntas, donde el cabello necesita más hidratación.
5. Enjuagar el cabello con agua demasiado caliente:
El agua caliente puede dañar el cabello, secándolo y haciéndolo más quebradizo. Opta por agua tibia a fresca durante el enjuague final para conservar la hidratación y el brillo de tu cabello.
6. Frotar el cabello con la toalla:
Cuando salimos de la ducha, es tentador frotar vigorosamente nuestro cabello con una toalla para secarlo rápidamente. Sin embargo, esto puede causar fricción excesiva y dañar las cutículas capilares. En lugar de eso, envuelve tu cabello en una toalla suave y sécalo suavemente para quitar el exceso de agua.
7. Usar aparatos de calor:
Para preservar la salud de tu cabello, se recomienda evitar el uso de secadores y dejar que el cabello se seque al aire libre, pero sabemos que a veces no es posible, así que intenta mantenerlo al menos a 15 cm ;)
Cuida tu cabello evitando estos errores y adoptando una rutina natural con Homnès 🌱
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